Descripción y características: Es originario de la región mediterránea. Se trata de una herbácea perenne pero que se cultiva como anual.
El interés de cultivo de esta especie son los tallos, que pueden llegar hasta 1,5 metros de altura.
Tierra y abonado: Prefiere suelos profundos, de consistencia ligera, permeables y con bastante materia orgánica. En suelos pobres o mal abonados, las pencas se ahuecan y estrechan dando así un producto de mala calidad. Su cultivo no funciona bien en terrenos demasiado arcillosos o arenosos.
Siembra del cardo: En zonas muy frías se aconseja realizar la siembra en primavera, ya que las heladas de otoño se pueden producir muy pronto. En zonas más cálidas la siembra se realiza a principios de otoño, de forma que la roseta de hojas se forme antes del invierno. El cardo aguanta bien las heladas pero siempre que haya alcanzado un determinado desarrollo, en caso contrario, si todavía no está lo suficientemente desarrollado para aguantar el frío, la planta podría incluso morir.
La separación entre líneas debe ser entre 75 y 80 cm, la separación entre semillas entre 5 y 10 cm y la profundidad de la siembra debe estar entre 2 y 4 cm. Conviene dejar las semillas en agua 10 horas antes de la plantación para favorecer la germinación. El mejor método de plantación de este cultivo es la siembra directa, ya que no lleva demasiado bien los trasplantes.
Labores y mantenimiento: El cardo necesita que el terreno este aireado por lo que precisa de laborar el terreno entre líneas para favorecer la aireación, además al llevar a cabo esta labor se está realizando un aporcado que beneficiará la calidad del producto ya que así se fortalecerá el sistema radicular y los tallos consiguiendo pencas más fuertes y gruesas. No es una planta muy exigente en riego, es necesario regarla recién plantada y después necesitará un riego cada 8 días que sea abundante pero sin producir encharcamiento. Si se quiere una mejor calidad del producto conviene blanquear las pencas, esto se realiza cuando las hojas están ya maduras, se envuelven grupos de pencas en bolsas de papel para evitar que les dé el sol y se active la clorofila.
Recolección de los cardos: Se cortarán las pencas con sus hojas, en el caso de que se hayan blanqueado se realizará la recolección a los 20 días de haberlos tapado. Una vez recolectado el cardo no se conserva bien porque se ennegrece o pudre, por lo que se deberá consumir pronto o hacer conserva.
Nombre científico: Cynara cardunculus
Familia: Asteraceae