Planificar la distribución de un huerto es un proceso laborioso en el que influyen varios factores, estos son los más importantes a tener en cuenta:
- El espacio disponible
- Las necesidades de consumo
- Las características de la tierra
- La orientación solar
- La distribución de espacios
- La disponibilidad de agua
- Las necesidades de riego
- Las técnicas de cultivo.
Es conveniente utilizar esquemas o dibujos tanto para la planificación como para el futuro seguimiento de la evolución del huerto. Así mismo, podemos tener un cuaderno de huerta donde ir apuntando varios datos como son las fechas idóneas de siembra y recogida, trasplantes, cantidad de plántulas o semillas necesarias, dosis de compost y en general, observaciones en cuanto a la evolución de los cultivos que nos ayudaran a ir mejorando el cultivo.
En cuanto a los gráficos es importante diferenciar los bancales y espacios, numerándolos, esto será muy importante a la hora de determinar las rotaciones de cultivos. Incluiremos espacios de biodiversidad acompañante También es conveniente dibujar un esquema del sistema de riego.
Algunos de los elementos que pueden estar presentes en la huerta y que por lo tanto deberían aparecer en los planos son:
- Compostador o compostadores.
- Tanque de agua o aljibe.
- Invernadero.
Otro aspecto a tener en cuenta en la planificación es determinar los límites del terreno a cultivar, si es necesario vallar y también conviene planificar un sistema que haga la función de cortavientos, un seto, que nos ayudará en ahorro de agua y en prevención de plagas.